¿Quieres saber qué pienso?
Creo que te bastaría con saber que no me arrepiento.
Veo una y otra ves las posibilidades, y me veo a mi en cada una de ellas lamentándome por todo lo que dejé de hacer, todo lo que no te dejé hacer y eso, eso duele. Tan sólo imaginarlo duele tanto, que me hace convencerme cada ves más de lo que hago.
¿Qué hago? te preguntarás...
Vivo, respiro y me salgo del agua, encuentro alas y me las pego, me las coso al alma. ¿Y, sabes? Me gusta.
Hay cosas que no se pierden ni con el tiempo ni con la vida ni con S ni con A. Y eso es algo que no me atrevo a negar, nunca he considerado prudente negar lo que creo real.
Me he consumido entre en un mar de THC, LSD y una droga más letal, fatal aún.
Mi mente.
Tu has de saber a qué me refiero.
Hay cosas que queremos ver y no debemos, hay otras que debemos ver y no queremos, hay otras que vemos sin querer y debemos decir, así que yo te digo que las abejas de aquel panal, se han ido a dormir como los osos en invierno. Y han comido tanto... que quien sabe si quieran despertarnos con sus hermosos bailes.
¿Quieres que te diga la verdad?
No sé como lidiar con tu ausencia, nunca he sabido y ahora prefiero ignorarlo... Veo... Restos de luz, esos pocos que llegan desde mil millones de kilómetros hasta aqui, ver los pequeños rayos que te iluminan, hieren como Doncella en mi pecho. Pero traen el confort que se encuentra al saber que esos monstruos que podrían atormentarte, si son ahuyentados.
La verdad... Es algo que yo no sé, pero dentro de mi ignorancia, salgo un poco de detrás de la pared sólo para contarte mis ya tomadas decisiones, nunca ha sido fácil expresarme cuando se trata de éste tipo de cosas y ahora te digo, que he decidido perderme en un basto mundo que se abre ante mis ojos, no ante mis pies... Y de la mano.
Ahora te digo...
Me hace feliz.
Y no puedo vivir suspirando por un incierto horizonte. No quiero.
Hoy... Te digo que hasta allí llegué yo,
Y no, no paso de ti, nunca pasaría de ti.
Alguna ves dijiste que lo aceptarías, y creo que sería injusto no hacerlo si miras las flores que tienes alrededor, si evalúas tu sentir, y lo que piensas del concepto de justicia...
Blanco es un color para iluminar, imperdible como las almas, pero la ceguera a la que eres sometido, con un charco de por medio... Hace que te enredes en patadas de ahogado, así que hay que sobreponerse.
Hay que ser más.
Más inteligente.
Más hábil.
Más realista.
Y ceder...
Hay que ser más, concientes.
Hay que saber decir no más.
10 comentarios:
Me ha gustado.
Me parece que escribes de una manera... emocionante.
(Sin segundas interpretaciones)
Suerte... y abrazos.
Gracias mujer, supongo que hay cosas que debemos enfrentar siendo nosotros en todo el sentido de la palabra y realmente ver objetivamente una de esas frases de cajón que recuerdo...
"Lo que es para uno... Nadie se lo quita".
Y si, eso es algo que yo no sé, nadie sabe nada a ciencia cierta pero... Hay que atar los hilos que se tengan a la mano y hacer hasta donde se pueda en el momento.. lo demás.. Pues vendrá o no con el tiempo.
Yo creo que... creo que nada vendrá con el tiempo. Debes atraer tú a las cosas.
"El que la sigue la consigue" y nada tiene que ver el tiempo.
El tiempo no existe. Quédate con eso, analízalo y reflexiónalo para ti misma. Quizás halles respuestas. Yo, personalmente (valga la redundancia), no creo en el tiempo, y a pesar de ello me agobia pensar que no llegaré a tiempo a mañana. Un día me retrasaré y se me escapará el futuro, y tendré que coger otra "guagua" (o bus).
¿Contradictorio? Lo sé.
Saludos y, como siempre, buena suerte.
Probablemente tienes razón de alguna manera, pero yo si creo en el tiempo... Lo que no creo es en quedarse esperando a que le lleguen a uno las cosas.
Pero si, al final quedamos en ceros.
"El tiempo no ha cambaido nada, Amèlie sigue refugiándose en su soledad, se divierte haciéndose preguntas idiotas sobre la ciudad que se extiende ante sus ojos" - Amèlie.
¿Y si no estuviesemos hablando de Amèlie ni de preguntas idiotas?
Sigo sin quedarme a esperar.
Sabia decisión. Al final, al que se queda a esperar, se le escapa la vida como si fuese arena, por entre los dedos. ¿Te das cuenta? La arena que simboliza el tiempo (reloj de arena) y que también simboliza la vida.
El tiempo y la vida.
Vaya... al final, va a resultar que el tiempo es más verdadero que yo misma.
Abrazos.
Hay tantas cosas por ver en los caminos de arena que se cruzan y los que no, dentro de esas paredes de vidrio.. Se refieren al infinito y al conocer, al imparable saber que nos trae sus expresiones y situaciones.
Todas y cada una, inevitablemente incontrolables, absolutamente desconocidas... Pero a fin de cuentas producto de nuestros andares y acciones.
Indudablemente siempre lo será, el tiempo no acaba sin ti, tu tiempo acaba sin tu cuerpo, lo demás son recuerdos.
Echo de menos tus textos.
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